Hoy quiero ayudarte a que, cuando suene el despertador a las 7 de la mañana, no tengas que tirarte media hora delante del armario decidiendo qué ponerte, y puedas dar a 'retrasar alarma' al menos un par de veces más.
LUNES Después de un fin de semana inolvidable, ¿a quién le apetece ir a la oficina el lunes? Por eso, lo mejor será que apuestes por un look con color que te llene de vitalidad y energía para plantar (buena) cara a los nubarrones grises que te esperan.
MARTES Ya metidos en faena, el segundo día de la semana suele ser sinónimo de reuniones, comidas de trabajo, más reuniones... Por eso, necesitas un look formal pero, al mismo tiempo, femenino y con mucha personalidad. Los trajes de chaqueta, las siluetas lápiz y los detalles en cuero serán tus mejores aliados.
MIÉRCOLES ¿De verdad aún quedan tres interminables días para que vuelva el descanso de fin de semana? De nuevo, tu look sale al rescate con una nueva inyección de optimismo y color. En esta ocasión, apuesta por una prenda protagonista en un color cargado de buenas vibraciones (amarillo, rojo, verde, azulón...) y rodéalo de básicos para que no sea llamativo en exceso. Y píntate los labios de rojo.
JUEVES Sinónimo de cañas post-oficina o, lo que es lo mismo pero más moderno, el 'afterwork'. Un vestido de corte 'lady', elegante, formal, pero a la vez con un plus de sofisticación, te hará mirar el final de semana con buena cara y, además, te permitirá lucir perfecta como un look 2 en 1 si finalmente decidís prolongar la velada.
Espero que estas sencillas ideas os hayan servido de ayuda para elegir unos looks casuales y con estilo.
Un Saludo, Elena.